La velocidad deja atrás a la seguridad

El congestionamiento vehicular en la avenida Ballivián a medio día

Semáforos, bocinas, señalizaciones, reparaciones, ruido incontrolable. La gente se va moviendo de un lugar a otro sin detenerse en la ciudad de Cochabamba.

La velocidad suele ser lo más importante en la pista, 

llegar a otro lugar en un corto tiempo sobrepasa el deseo de llegar sano y salvo. Es el caso de los conductores del transporte público como el del particular, pero no sólo es el caso de los conductores, existen los pasajeros que presionan al conductor para que acelere la marcha.

Es lo que le sucedió al conductor de un radio móvil, Julio Camacho, en una “carrera”. Él llevaba a un señor y a su hijo al promediar las 12:30. El pasajero le dice:

- ¡Acelere pues maestrito! ¡¿Qué no ve que mi hijo está mal?!

-¿Pero por dónde quiere que me meta señor? no tenemos paso.

-¡Busque un lugar, de la vuelta… haga algo!

Julio se quedó callado. No siguió con las indicaciones del pasajero, pues sólo habría logrado griteríos con los demás conductores o un accidente.

Este hecho sirvió para demostrar al conductor que la gente olvida los servicios de un radio móvil. El radio móvil además de dar el servicio de transporte, brinda comodidad y lo más importante… seguridad.